¿Cómo poner límites a tus hijos

con firmeza y tranquilidad?
Por: Gaspar Manuel Zavala Taylor - Consultor Educativo Familiar
En el proceso educativo con los hijos es fundamental que los padres de familia sepan cómo y cuándo poner límites, pues ésta es una manera de formarlos para que sepan enfrentar al mundo en su vida adulta.

La formación de los hijos se ha tornado cada vez más compleja; el consumismo, el abuso de las redes sociales, el hedonismo entre otros factores, están haciendo que los padres de familia no sepan cómo enfrentar ciertas situaciones con sus hijos.

Desafortunadamente son cada vez más los padres de familia que no sabes cómo poner límites a sus hijos o bien tal vez sí sepan, pero no lo hacen por miedo, por sobreprotección, por no estar en conflicto con ellos o simplemente, es más fácil y cómodo, lo que le permite a papá o mamá dedicar más tiempo para ellos, muchas de las veces para actividades vanas que no tienen o aportan un crecimiento intelectual, emocional o físico.

Hay muchas maneras de establecer límites a los hijos, será importante saber ubicar cuáles son los mejores, los más formativos y aprovechar las circunstancias de cada momento en cada hijo; un ejemplo muy sencillo en los jóvenes, es el uso de los teléfonos móviles y otros dispositivos que si bien son de mucha utilidad, es importante que se tenga un plan para su uso y este sea con responsabilidad; otro ejemplo es que los hijos sepan desde muy pequeños que no siempre se puede tener todo ya sea en la ropa, juguetes o bien, en lo más simple, cuando los papás van a supermercado con los hijos, que sepan que no en cada ida a la tienda se les puede comprar la golosina que tanto les gusta.

ESTABLECER OBJETIVOS Y UN PLAN.

Poner límites a los hijos no es una tarea fácil, implica primero que los padres de familia tengan muy claro cómo quieren formarlos y también sepan que son acciones que requerirán exigencia y seguimiento.

Hay una serie de elementos fundamentales que los padres de familia deberán tener en cuenta al momento de poner límites a sus hijos, entre ellos, el objetivo que se pretende lograr, la motivación que podrán manejar, el seguimiento que le darán y el más importante, el cariño con el que trasmitirán al momento de hablar con el hijo o la hija sobre el porqué de la limitación.

Hoy, muchos padres de familia dicen poner límites y lo hacen sin tener un objetivo, sin un plan. Por ejemplo, un adolescente que quiere salir a una fiesta y se le niega el permiso con la típica frase “no vas porque lo digo yo” esto, lejos de formar, deja al hijo con un sentimiento de incomprensión y cierta frustración lo que se puede convertir en conductas negativas. Hay que saber cómo y cuándo poner límites en cada etapa del desarrollo de los hijos; en particular, en la adolescencia es importante que como padres de familia no pierdan de vista las múltiples reacciones que pueden tener los hijos en esta etapa ante los cambios hormonales, esto provoca que puedan tener actitudes muy diversas y repentinas que al poner límites, puedan tener múltiples reacciones; para ello ayuda mucho la convivencia y la comunicación, sin dejar al lado el cariño que se les brinde.
Poner límites no es siempre el tema de permisos, es tener un horario más o menos establecido, asignar tareas en casa, no comprar siempre todo lo que se quiere, regular de manera balanceado el consumo de ciertos alimentos con bajos en nutrientes (comida chatarra), establecer tiempos para el uso de ciertos aparatos electrónicos y otros que es importantes que los padres de familia sepan identificar, todo esto desde temprana edad.

Hay padres de familia que les cuesta mucho trabajo establecer límites a sus hijos, primero porque no sabes cómo hacerlo o lo hacen de manera poco formativa, papás que le tienen miedo a sus hijos, no quieren poner límites por no hacerlos sentir mal, creen que, si no se les da todo, les están haciendo un daño, cuando el mal se los hacen al no saber marcar esos límites que son fundamentales en el proceso formativo, para la vida misma.

Desafortunadamente este tipo de situaciones son cada vez más frecuentes, de ahí que veamos a muchos niños, adolescentes, jóvenes y adultos que no sabes cómo conducir muchos aspectos de su vida en cosas muy sencillas, como el saber decir “no”, controlar ciertos impulsos o lo que es mucho más grave, ser personas que creen que se merecen todo en la vida, porque en su infancia no hubo ningún tipo de restricciones.

Papás, los invito a que reflexionen sobre este tema y se planteen seriamente saber cómo establecer límites con sus hijos, sé que al final del proceso de educación, les agradecerán que los hayan criado con los limitantes que los ayudaron en la formación de un carácter y de su cuerpo.

gmztaef@gmail.com
CÓMO PONER LÍMITES A TUS HIJOS, CON FIRMEZA Y TRANQUILIDAD
Por: Gaspar Manuel Zavala Taylor - Consultor Educativo Familiar
En el proceso educativo con los hijos es fundamental que los padres de familia sepan cómo y cuándo poner límites, pues ésta es una manera de formarlos para que sepan enfrentar al mundo en su vida adulta.

La formación de los hijos se ha tornado cada vez más compleja; el consumismo, el abuso de las redes sociales, el hedonismo entre otros factores, están haciendo que los padres de familia no sepan cómo enfrentar ciertas situaciones con sus hijos.

Desafortunadamente son cada vez más los padres de familia que no sabes cómo poner límites a sus hijos o bien tal vez sí sepan, pero no lo hacen por miedo, por sobreprotección, por no estar en conflicto con ellos o simplemente, es más fácil y cómodo, lo que le permite a papá o mamá dedicar más tiempo para ellos, muchas de las veces para actividades vanas que no tienen o aportan un crecimiento intelectual, emocional o físico.

Hay muchas maneras de establecer límites a los hijos, será importante saber ubicar cuáles son los mejores, los más formativos y aprovechar las circunstancias de cada momento en cada hijo; un ejemplo muy sencillo en los jóvenes, es el uso de los teléfonos móviles y otros dispositivos que si bien son de mucha utilidad, es importante que se tenga un plan para su uso y este sea con responsabilidad; otro ejemplo es que los hijos sepan desde muy pequeños que no siempre se puede tener todo ya sea en la ropa, juguetes o bien, en lo más simple, cuando los papás van a supermercado con los hijos, que sepan que no en cada ida a la tienda se les puede comprar la golosina que tanto les gusta.

ESTABLECER OBJETIVOS Y UN PLAN.

Poner límites a los hijos no es una tarea fácil, implica primero que los padres de familia tengan muy claro cómo quieren formarlos y también sepan que son acciones que requerirán exigencia y seguimiento.

Hay una serie de elementos fundamentales que los padres de familia deberán tener en cuenta al momento de poner límites a sus hijos, entre ellos, el objetivo que se pretende lograr, la motivación que podrán manejar, el seguimiento que le darán y el más importante, el cariño con el que trasmitirán al momento de hablar con el hijo o la hija sobre el porqué de la limitación.

Hoy, muchos padres de familia dicen poner límites y lo hacen sin tener un objetivo, sin un plan. Por ejemplo, un adolescente que quiere salir a una fiesta y se le niega el permiso con la típica frase “no vas porque lo digo yo” esto, lejos de formar, deja al hijo con un sentimiento de incomprensión y cierta frustración lo que se puede convertir en conductas negativas. Hay que saber cómo y cuándo poner límites en cada etapa del desarrollo de los hijos; en particular, en la adolescencia es importante que como padres de familia no pierdan de vista las múltiples reacciones que pueden tener los hijos en esta etapa ante los cambios hormonales, esto provoca que puedan tener actitudes muy diversas y repentinas que al poner límites, puedan tener múltiples reacciones; para ello ayuda mucho la convivencia y la comunicación, sin dejar al lado el cariño que se les brinde.
Poner límites no es siempre el tema de permisos, es tener un horario más o menos establecido, asignar tareas en casa, no comprar siempre todo lo que se quiere, regular de manera balanceado el consumo de ciertos alimentos con bajos en nutrientes (comida chatarra), establecer tiempos para el uso de ciertos aparatos electrónicos y otros que es importantes que los padres de familia sepan identificar, todo esto desde temprana edad.

Hay padres de familia que les cuesta mucho trabajo establecer límites a sus hijos, primero porque no sabes cómo hacerlo o lo hacen de manera poco formativa, papás que le tienen miedo a sus hijos, no quieren poner límites por no hacerlos sentir mal, creen que, si no se les da todo, les están haciendo un daño, cuando el mal se los hacen al no saber marcar esos límites que son fundamentales en el proceso formativo, para la vida misma.

Desafortunadamente este tipo de situaciones son cada vez más frecuentes, de ahí que veamos a muchos niños, adolescentes, jóvenes y adultos que no sabes cómo conducir muchos aspectos de su vida en cosas muy sencillas, como el saber decir “no”, controlar ciertos impulsos o lo que es mucho más grave, ser personas que creen que se merecen todo en la vida, porque en su infancia no hubo ningún tipo de restricciones.

Papás, los invito a que reflexionen sobre este tema y se planteen seriamente saber cómo establecer límites con sus hijos, sé que al final del proceso de educación, les agradecerán que los hayan criado con los limitantes que los ayudaron en la formación de un carácter y de su cuerpo.

gmztaef@gmail.com